EMPAÑANDO RAY BANS

Si hubiera sido por mi , todavía tendría los lentes de sol puestos. Es ese estilete hardcore-johnny cash que me hace creer más fuerte, más ruda o más parca, por que no. Tuve que dejarlos cuando prendí la computadora del local, no veía. Me los volví a poner cuando fui a comprar la comida, por que tenía frío, sueño, hambre, ganas de fumar, y sueño de vuelta. Es una maldición imperdonable, es un insulto cuando tu papá te dice que el día va a mejorar y vos salís en remerita como si estuviéramos en el Caribe. No, muñeca, esto es la fucking baires, y ni siquiera. Cagada de frío pero manteniendo un estilo sombrío, muy de fumar, pero claramente la paradoja se mantiene, si pudiera fumar para conmemorar el momento duranga, no estaría padeciéndolo, ya que la principal causa de esto es que no fumo. Me acaricio el parche subiendo las escaleras mecánicas, ya me marcaron que se me está volviendo tic, pero ya lo he dicho, lo acaricio cual último recurso, como solución final.El patio de comidas huele a caca de perro un poco, pero después se vuelve un poco ketchup y lo dejo pasar. No es momento de analizarlo. Pienso y medito, que lo mejor que me puede pasar es que amenacen de bomba al Norcenter, cuando me llega un mensaje que sin quererlo me arregla el día. El contenido no importa, importa lo desinteresado de ayudar, y lo bien que hace. Era un buen momento para sacarme los lentes, but then again no.

Los mantengo hasta acostarme en las sillas de la oficina de mi papá, que deglute un triple big mac sin percatarse que hay 3 carnes ahí "esto es triple?" me pregunta, que poco paladar.

"Alma, Valeria, mi novia, una amiga, es la mejor frase del cine mundial", me dice de la nada. "Creo que a las únicas dos personas que nos gusta, es a vos y a mi" me sonrie.

Ahí sí me saco los anteojos, mi papa lo había dicho sin querer.

"Nos encantan las cosas de nenas" le respondo. Era la explicación al bienestar que avecinaba.

Al instante me levanto de los sillones rojos, mientras apoyo los lentes en la mesa, y me voy a hacer que trabajo. Esas cosas, las que no esperás, son las que te hacen sacarte los lentes.