No quiero mentir. Mar tenía razón. Por más que todos asumimos o sabemos que la historia de ella va a terminar 10 puntos y con Javier Barden, y yo probablemente termine mi semana en la casa de la babe comiendo ravioles de más para acumular para Iom Kipur, quiero dejar algo aclarado desde el vamos.
1-Sí, es terapeútico, y me distrae y me evita mambearme por boludeses que no tienen sentido.
2-Que conssssssste que yo me quiero ir a Positano y a la Toscana mucho antes de empezar esta novelita.
3-Empecé a leer la Divina Comedia este verano, si la retomo no será por que la escritora la nombra.
4-Yo ya usé el recurso que ella usa, pero en vez de nombrarlos Depresión y Soledad, y vestirlos de policías, lo llamé Fabián y era una nube gris.
He dicho.
Atte.
Su videoclub amigo.
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